El conocido. "El día de la presentación. II "

Publicado en por Bé.


Los nervios me corrían todo el cuerpo. Ya no podía echarme atrás. No podía salir corriendo. Sabían que era yo.

-Sí, soy yo.
- ¿Le importaría acompañarnos? Tenemos unas cuantas preguntas.

No podía suponer que aquel chico era policía. El y su acompañante vestían vaqueros normales uno de jersey y el otro de chaqueta. Hasta que me di cuenta que debajo de la chaqueta abierta se escondía la funda de una pistola.

Me subí al coche. Me oía el corazón latir cada vez más rápido. Se me pasaba por la cabeza de todo. Parecía una ladrona. Al llegar a comisaría, me subieron a la primera planta, todo el mundo me miraba y creo que me puse hasta roja.

Me señalaron con el brazo que me sentara. Y allí estaba yo, como una delincuente en una película de polis.

- Bien Cayetana, tenemos entendido que ayer cerca de su domicilio ha sucedido..
- He sido yo.

Antes de que acabara de decirme la frase, mis nervios no me han dejado esperar.

- ¿Qué has sido tú?

- Me estaba metiendo mano. Sólo quería irme. Me defendí. Yo llame al 112, para saber que estaba bien. No iba a matarlo ni mucho menos. No lo he dejado allí. Que debería de haberlo echo .. ¿Qué quieren?

- Su numero ha sido registrado, y por eso dimos con usted. Además que el chico nos ha dicho que había sido una chica morena, le enseñamos su foto de dni y lo ha confirmado.

- ¿Qué me va a pasar? Solo me venia la imagen de verme entre rejas, comiendo esa mierda de comida que se ve en las cárceles de las series. Estaba más tranquila. Pero ahora, solo sabia estar a la defensiva, cosa que no me ayudaba mucho.

- Nada. Queremos que nos cuente la historia. Tenemos todo el tiempo que quiera.

- Muy bien. Una vez contado todo, la sorpresa es mia.

- Realmente la buscamos para decirle, que le chico estaba bien. Alguna herida pero nada grave. ¿Lo conocía?

- No.

- ¿Segura?

- No lo había visto nunca. ¿Por qué?

- Se ha escapado del hospital durante las horas de observación. Antes de que supiéramos que está denunciado por tres violaciones.

No podía creerlo. Mi cara era un poema. Lo primero que se me viene a la cabeza, es la imagen de cuando subía su mano por mi muslo.

- Va a venir a por mi. ¿Creen eso?

Los dos se miran entre sí. Hasta que el llamado Nuño, me contesta.

- Le vamos a poner vigilancia 24 horas, durante un tiempo hasta que no tenga riesgo de sospechas, o lo pillemos.

- ¿Vigilancia? Mis padres no saben nada,no quiero que se enteren.

- No se preocupe. Nadie se debe enterar yo y mi compañero la seguiremos a todos sitios, nadie sabrá nada. Mantendremos el contacto, puede irse.


Una hora después, estaba camino de mi casa. El miedo estaba en mi cuerpo y cada vez miraba mas a todo lo que se movía cerca mía. Llegó a casa. Lo primero que hago es llamar a mi amigo, le cuento todo y al final me trato de convencer que es un lujo lo de tener vigilancia. Que nada puede pasarme. Y que me tengo que sentir tranquila.

Me he dado cuenta de que llevo dos días sin mirar mi correo, con el cuento de salir, y todo este suceso se me pasó mirarlo ayer y hoy. Cuando enciendo el ordenador, lo primero que hago es ir al acceso directo de mi cuenta.

Miro el correo. Y de repente tengo cuatro emails. Cuatro emails de un desconocido...

(continuará)

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A
Joder chica te ha pasado de todo, por favor sigue contando, que íntriga...
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